En el centro histórico de Torroella de Montgrí, en un edificio esquinero de 1900, se encuentra esta acogedora planta baja reformada de 49 m² construidos según Catastro. La vivienda combina el carácter de las construcciones tradicionales —con techos abovedados, arcos y muros de piedra vistos— con una reforma actual que aporta comodidad y funcionalidad.
Al acceder, nos recibe un gran espacio diáfano con suelos cerámicos, ideal como salón-comedor y zona de estar. La amplitud del ambiente y la estructura original contribuyen a una sensación de calidez y autenticidad.
La cocina, abierta al espacio principal, conserva elementos rústicos como el dintel de piedra, generando un ambiente con personalidad. La vivienda dispone de un baño totalmente reformado, con ducha amplia y grifería moderna, además de un elegante mueble de baño con iluminación LED integrada.
La zona de dormitorio queda integrada dentro del espacio abierto, con múltiples posibilidades de distribución gracias a la puerta corredera estilo granero que aporta privacidad y diseño.